Desarrollo sostenible en América Latina: un foro crucial

Santiago fue el epicentro del Octavo Foro de los Países de América Latina y el Caribe sobre el Desarrollo Sostenible, un evento crucial organizado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal). Este foro reunió a destacados representantes de gobiernos, entidades de Naciones Unidas y organizaciones de la sociedad civil, buscando abordar los desafíos del desarrollo sostenible en la región. Entre los asistentes, brilló la participación de Michel Toledo, director de la Fundación Derechos Mayores, quien trajo a la mesa una crítica fundamental: la falta de consideración del envejecimiento en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Esta omisión, según Toledo, representa una deuda histórica que debe ser urgentemente atendida.

Toledo, quien dirige la Fundación que opera el Eleam Cristina Calderón en Magallanes, participó activamente en las sesiones de trabajo con la sociedad civil durante los primeros días del foro. En su intervención, enfatizó que a menos de cinco años de la fecha límite para alcanzar los ODS, la creciente desigualdad en Latinoamérica y el Caribe es alarmante. “Estamos ante un diagnóstico preocupante y, además, el financiamiento del desarrollo social se presenta como uno de los grandes obstáculos que enfrentamos”, advirtió. La cuestión del financiamiento se torna aún más apremiante cuando se considera la posible despriorización política y la ineficiencia en el gasto público, lo que plantea serias interrogantes sobre la falta de recursos disponibles para enfrentar las problemáticas sociales.

Un punto crucial que Toledo resaltó durante su intervención fue la creciente preocupación por el envejecimiento de la población, una realidad que no está reflejada adecuadamente en los ODS. “La vejez ha sido invisibilizada de forma sistemática, y hoy estamos pagando las consecuencias de esta falta de enfoque”, afirmó. La demografía en países como Chile y particularmente en Magallanes, evidencian un cambio significativo que ya está ocurriendo en la actualidad, no en un futuro lejano. Toledo enfatizó que se requieren soluciones concretas y efectivas ante esta realidad demográfica, que, hasta el momento, no han sido abordadas con la seriedad que merecen.

El director de la Fundación Derechos Mayores apuntó que las reformas en el sistema de pensiones, aunque necesarias, no son suficientes para enfrentar los diversos desafíos que presenta el envejecimiento. “La transformación debe ser multidisciplinaria”, propuso, sugiriendo que se deben implementar políticas públicas integrales que aborden la salud, la vivienda, los cuidados, la educación y la participación social de las personas mayores. Esta propuesta busca garantizar un enfoque completo que permita no solo atender las necesidades básicas, sino también fomentar la inclusión y el desarrollo pleno de este grupo etario.

Finalmente, Toledo hizo un llamado urgente para que la agenda global integre la perspectiva de envejecimiento de manera transversal. “Ya es hora de hablar de economía plateada, de ciudades amigables con las personas mayores y de un sistema de formación técnica que se ajuste a las necesidades demográficas actuales”, concluyó. Su mensaje resuena con fuerza en el foro, instando a repensar la forma en que se forman los profesionales del futuro, y sugirió una mayor capacitación en áreas como gerontología y cuidado, ajustadas a las demandas de la población envejecida. La urgencia de estas consideraciones es clara, y los esfuerzos para incorporarlas deben ser inminentes para cumplir con los objetivos de desarrollo sostenible en los próximos años.

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